Evitemos el sedentarismo

El sedentarismo, o llevar un estilo de vida sedentario, es una preocupación creciente en el mundo actual, donde muchos trabajos y actividades de ocio implican periodos prolongados de estar sentado o inactivo. He aquí algunas estrategias para evitar el sedentarismo:

• Pausas Activas: Si su trabajo implica pasar mucho tiempo sentado, intente hacer pausas breves cada 30 o 60 minutos. Póngase de pie, estírese o dé un breve paseo. Esto no sólo reduce el sedentarismo, sino que también ayuda a la concentración y la productividad.
• Incorpore el movimiento a su rutina: Busque formas de incluir más actividad física en su rutina diaria. Por ejemplo, utilice las escaleras en lugar del ascensor, vaya andando o en bicicleta al trabajo, o realice tareas domésticas que requieran un esfuerzo físico.
• Haga ejercicio con regularidad: Intente realizar al menos 150 minutos de actividad aeróbica moderada o 75 minutos de actividad vigorosa a la semana, junto con ejercicios de entrenamiento de fuerza al menos dos días a la semana, según recomiendan las directrices sanitarias.
• Actividades de ocio activas: Elija actividades que impliquen actividad física, como senderismo, ciclismo, baile o deportes. Pueden ser formas estupendas de mantenerse activo y socializar al mismo tiempo.
• Escritorio de pie: Si es posible, utilice un escritorio de pie en el trabajo, que puede ayudarle a reducir el tiempo que pasa sentado.
• Reuniones a pie: Si tiene la posibilidad, celebre las reuniones andando. Esto puede ser especialmente eficaz en las reuniones uno a uno.
• Rastreador de fitness: Utilice un rastreador de fitness o una aplicación de smartphone para controlar tus niveles de actividad diaria. Muchos de estos dispositivos pueden recordarle que se mueva si lleva demasiado tiempo inactivo.
• Actividad a la hora de ver la tele: Si le gusta ver la televisión o jugar a videojuegos, intente incorporar algo de actividad física durante este tiempo. Por ejemplo, haga algunos ejercicios ligeros, estiramientos o utilice una bicicleta estática.
• Entorno de trabajo flexible: Si su trabajo se lo permite, considere la posibilidad de teletrabajar o de trabajar en un entorno flexible que le ofrezca más oportunidades de realizar actividad física.
• Apoyo social: Participe con amigos o familiares en actividades físicas. Tener un compañero de entrenamiento o unirse a un equipo deportivo puede proporcionar motivación y hacer que la actividad física sea más agradable.
• Movimiento consciente: Incorpore prácticas como el yoga o el tai chi, que son beneficiosas tanto para la salud física como mental.

Comprender los riesgos de un estilo de vida sedentario puede ser una poderosa motivación. Infórmese sobre los beneficios de mantenerse activo. Recuerde que es importante elegir actividades que le gusten y que pueda mantener a largo plazo. Los cambios graduales pueden producir beneficios significativos con el tiempo. Como siempre, si tiene algún problema o afección de salud específicos, es mejor que consulte a un profesional sanitario antes de iniciar cualquier nuevo régimen de ejercicio.